28 agosto 2011

Tres cosas hay en la vida: afectos, metal y Perón

Acaba de cumplir años, en el día que la noche extingue, la Flaca más querida y, en el mismo instante, empieza a cumplir sus tres meses mi bebucho chanchón. Había que festejar.







02 mayo 2011

El Día de los Trabajadores y la pena (del) Capital

Está bien, vos después pinchás en la imagen y te enterás de todo, Google es de lo  más grosso que ha dado la cultura actual, pero, Sr. Google, hoy es el Dia de los Trabajadores, ni el Dia de la Industria, ni el Día de las Herramientas y los Medios de Producción, ni el Día Internacional del Capital. Y su dibujo, Sr. Google, no tiene un sólo trabajador.

Este día homenajea a los trabajadores pero, como cualquiera que tenga acceso a Google puede encontrar, el homenaje se instauró un día como hoy, porque un día como hoy, hace 125 años, los obreros de Chicago se cansaron de la flexibilización laboral, si se me permite la licencia idiomática y temporal, y empezaron una huelga que tuvo gran apoyo y cuyo eslogan era "Ocho horas para el trabajo, ocho horas para el sueño y ocho horas para la casa".

Los Trabajadores resistieron una gran batalla contra el Capital, y los palos de los batatas de entonces que podía pagar, y las traiciones sindicales, también a buen precio, y la eterna lealtad represiva policial, aunque no logró resistir del todo contra el también barato ejército mediático y el poderoso y siempre aristócrata brazo judicial.

Porque, si bien el 1ro de Mayo unos 200 mil trabajadores iniciaron la huelga que otros 200 mil apoyaban con la amenaza de seguirlos en la medida, la lucha, que fue el resultado de al menos dos años de reclamos, en la industrial y esclavista Chicago, se mantuvo un tiempo, el 2 y el 3, los trabajadores, unidos y en la calle, le demostraban al Capital que su policía por la fuerza no les iban a ganar y fue el 4, cuando seguían firmes en esa postura a pesar del recrudecimiento del embate de los uniformados, el Capital, que no carece de recursos, consiguió un infiltrado barato que tirara una bombita incendiaria y por el módico precio de un leal agente muerto y otro par de leales heridos, terminó aceptando la obvia jornada de 8 horas promulgada por Johnson, pero ni dos meses pasaron que los jueces, en un juicio inmundo, ya se habían cargado a los activistas anarquistas que comandaron la lucha, acusándolos del desmán: Los mártires de chicago.

El 1ro de Mayo se celebra, justamente Sr. Google, el inicio de la épica lucha de esos trabajadores por la dignidad.

No se celebra ni el 4, cuando fueron trampeados por el Capital, ni el 21 de junio, cuando empezó la payasada judicial con que el Capital, a fuerza de horca y cadena perpetua, les hizo sentir todo el rigor del escarmiento. La pena (del) Capital.

Los medios de producción, Sr. Google, históricamente, al menos en la cultura en que Google nació y se convirtió en una de las cosas mas grossas de esa misma cultura, son del Capital. Los medios, el dinero, las herramientas, son del capital, mientras que los obreros venden su fuerza de trabajo, la que se organiza, se desarrolla y se paga en relación al tiempo. El reclamo por la jornada de 8 horas es la traducción del reclamo salarial, redistributivo, participativo, democrático, equitativo, etcétera. Es sinónimo de la súplica por un poco de libertad, por algo menos de explotación y un contrato menos leonino o usurero o injusto entre el Capital y los trabajadores. En síntesis, representa la tensión existente entre la clase empresaria y la clase trabajadora.

Entonces, Sr Google, con sólo buscar en su invento virtual, advertirá que su dibujo de hoy parece más un homenaje simbólico al enemigo de los trabajadores que a los trabajadores. Ojalá que los suyos no sean tratados con el mismo descuido. 
     
Usted podría decirme, "justamente, somos un buscador, el mejor buscador del mundo, y un buscador se encarga de completar la información que al que busca le falta, sirve para encontrar lo que uno no conoce, lo que no está. Y el dibujo representa eso, porque dinero, fábricas y herramientas no sirven para nada sin los trabajadores y, en este caso, son los de Google los que completan el arte de nuestro logo de hoy".

Pero yo podría contestarle que, si fuera cierto, no sería una mala idea, aunque, para el caso, podrían haber sacado a los atletas del logo de las olimpíadas o a los animalitos del Día del Animal o a las flores y las mariposas del Día de la Primavera, disculpe que desconfíe de que justo inaugure su performance artística cuando de los trabajadores se trata.

No le critico su ideología, Sr Google, nadie puede desprenderse de ella, critico que en su nombre traicione a su clientela, a sus consumidores, a quienes acuden a usted con la ilusión de buscar información libre y conocimiento genuino. Un buscador no se puede hacer el boludo, Sr Google.  

Le dedico un muy feliz Día de los Trabajadores, Sr Google, a usted, a todos sus trabajadores, y a todos los trabajadores del mundo. Espero, me comprenda, uso el google pero soy de otra generación, para la cual no había mejor buscador que Polo Polosecki.  

07 febrero 2011

Una apuesta fuerte en favor de la cultura

El jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires y líder del Pro, Mauricio Macri, ha decidido ir por la presidencia y, cansado de los malos resultados que le han dado los intelectuales impopulares, como Abel Posse, el fino Palacios, etcétera, está decidido a redoblar la apuesta por la cultura nacional, aunque la oposición y todo el resto del planeta lo acusen de triste populista.descerebrado.

Luego de la apuesta a futuro que significó sumar a las filas del partido amarillo al Reutemann del siglo XXI, Orli Terranova, las genialidades políticas no cesan. La ex agente aeroportuaria y actual desnudista revisteril, María Luján Telpuk, y el cómico Miguel del Sel, son las caras nuevas encargadas de sumar a la original iniciativa del, por ahora, jefe de Gobierno porteño. La idea es que, si la letra con sangre ya no entra, con culos y boludeces va a pasar como por un tubo. Y no el del Maldonado.

Una de las iniciativas que se barajan es que el candidato santafecino, el Mi de Midachi, abandone el grupo cómico y forme con las otras dos personalidades de la cultura, un Centro de Estudios Políticos al que bautizarían MIORTE.

  






02 febrero 2011

Siempre serán

31 enero 2011

¿En qué quedamos? II

 Todo el mundo coincide en el récord de turismo de este año, que viene superándose feria a feria, y que puede tomarse como uno de los indicios de la bonanza económica, que los fabuleros de siempre no quieren aceptar.


El Popu dice que "Esperan un febrero récord como enero".


Crónica ocupa su título principal para presentar a "El mejor enero de la historia".

Tiempo Argentino, también, señala que "El recambio turístico auspicia un febrero a pleno", aunque puede ser una opereta de éstos oficialistas.



Al que sí que no se lo puede tildar de oficialista es a El Cronista de De Narváez, que se las arregla para encontrar la vuelta crítica con los precios y la falta de billetes, pero no puede ocultar, porque sería un papelón, el "Verano a full: a pesar de los precios y la falta de billetes, no hay lugar para la segunda quincena".
Pero, si hay algo que no le importa a las viejas oligarcas, cipayas y quejumbrosas, cuando se les desata el resentimiento, es cualquier papelón.
"En la costa, el balance de enero no fue tan bueno como esperaban", cacarea en el título principal el diario que pasó de ser el de mayor prestigio profesional a ser el Susana Giménez de la prensa escrita.
Ya me los imagino a Joaquín Morales Solá, a Mariano Grondona, a Fernancito Saguier, algún Mitre y a Darío Palavecino, cantando y bailando con la música de Vilage People con que Su cantó:
"Yo sólo quiero ser/ uuuu-na mu-jer",
pero con la letra cambiada:
"Yo sólo quiero al zurdo/ deees-pare-cer"




¿En qué quedamos?


¿En qué quedamos? ¿Macri gana o no gana? ¿Es una trampa o un editor que no lee las notas de sus redactores?








Por un lado, dice en la bajada que "Macri tiene garantizado el triunfo si se presenta a una reelección", según Equis, la consultora de Artemio López. Por el otro, en el quinto párrafo incluye los porcentajes del estudio, cita a Artemio aseverando que "No hay posibilidad de que no haya balotage" y asegura que "ni poniéndose al frente de la reelección, Macri tiene asegurado el triunfo".



El problema es que confunde a la gente y, sabemos, el electorado del Pro es la gente confundida. ¡No hagan campaña encubierta! 

30 enero 2011

La Nación promueve la libertad de expresión, de opiniones afines

     Pasé por La Nación punto com para ver los goles de Messi, porque hoy me había quedado sin leerlo, y me encuentro con una de sus típicas encuestas tendenciosas. Pregunta: ¿Está usted de acuerdo con la política inmigratoria de la Argentina? Ni más ni menos. No, con tal artículo o determinada medida, pregunta si el lector concuerda con toooda "la política inmigratoria de la Argentina". Todos sabemos que este tipo de preguntas, inmensas, generales y abstractas, sólo tienen malas intenciones.

     Siempre me pasa lo mismo: engrano, empiezo a discutir mentalmente y me desespera la idea de hacerlo en persona. La cabeza me estalla de ledirías y, de los escombros, siempre termino sacando una certeza superadora que, generalmente, me hace advertir el camino equivocado o me hace avergonzar. Ahora, por ejemplo, empecé a levantar presión, me dieron ganas de entrar a la redacción del diario sábana y gritar un par de cosas. Después, cuando me doy cuenta de que soy un boludo, de que estaba pensando inocentemente, como ahora con esto, me enojo mucho conmigo, me pongo colorado y agradezco no haberme metido en el coqueto edificio. Porque ensé como dos horas en lo que le diría a Saguier y a Mitre de su pregunta, de su encuesta, de la inmigración, de nuestros hermanos latinoamericanos, etc., etc., hasta decidí votar, a pesar de la pregunta pelotuda, pero, al pinchar en "Sí, estoy completamente de acuerdo", no me permitió seguir. Probé con "Desconozco la política y nada". Iba a cerrar la página y antes toqué "No" sólo por probar y ¿qué creen que pasó?...    

     Acertaron: voté que no estaba de acuerdo con las políticas inmigratorias.



    
     Pensé que los gorilas éstos nunca tienen una idea original. La manipulación de la información, la información encubierta, el populismo mediático, las encuestas falsas, en fin, el racismo y la discriminacióndo, no son inventos de esta época. Ni lo son la moral y la inmoralidad. Pero, creo que voy a tener que retractarme. Porque descubrí que La Nación inventó la Libertad de Expresión Variable (LEV). Consiste en velar por la libre opinión de todos... los que opinan como ese diario quiere. Asique, no quiero dejar de decir, aunque sea al aire, que aunque mi voto no modifique los porcentajes, sospecho que si yo no pude votar, tampoco habrán podido otros. Entonces, aunque ninguno de los lectores de La Nación me lea y aunque la presunta opinión de "la gente" opere a otra gente, esta encuesta carece de todo valor estadístico.

     La mentira no está en la falsedad de la encuesta, de última se venden con la pregunta idiota. Ni está en la LEV, porque asumen la vergüenza cuando el lector vota y se da cuenta (no creo que confíen ciegamente en el linaje gorila de sus lectores). Tampoco mienten al develar su preocupación por la inmigración, que cada vez viene más morocha. Pero, sí miente La Nación, cuando presenta esta bobada como una Encuesta. Una encuesta es una medición (de tendencia, de opiniones o posiciones porcentuales, etc) a parir de cuyo estudio se producirá alguna cosa, un cambio, una confirmación, un saber, etc. Los resultados, como toda información, son herramienta que influye en el resto de las personas. Un grupo de personas

     La dinámica inversa se denomina publicidad. La encuesta empieza con los encuestados, se establece en el ámbito de estudio y sale por el lado del saber, cuando puede ser convertida en influencia. El trabajo entero se orienta al saber, necesario para poder decidir y actuar libremente.

     La publicidad, en cambio, tiene su puerta de entrada por el lado opuesto, el de la influencia. La publicidad es persuación. Parte de la necesidad de dominar las voluntades sin que se note, sin la fuerza y sin necesidad de enfrentar al manipulado. El publicista necesita que los sujetos compren panchos, muestra una cantidad de gente que es feliz, fuerte y sabe volar, cuando come pancho, los sujetos la ven y pueden quedar influídos si quieren ser felices, fuertes y saber volar. El acuerdo de lectura es que los sujetos permiten exageraciones, falsedades e influencias cuando están ante una publicidad. reconocen el producto, más allá de la obra publicitaria, y se consideran avisados.

     Ahora, si la publicidad dice que el producto es un pancho y, cuando la gente lo compra, adentro del paquete hay un alfajor de chocolate, la cosa es un escándalo. Una pelotudez, una traición o la ruptura del contrato. La encuesta de La Nación, como tal, promete mostrar los resultados de opinión de la gente, pero lo que muestra es un cuadro, elaborado con el fin de que los falsos resultados cohesionen a los lectores en dirección a sus intereses. Parecen Bonelli tapando su carencia de argumentos con "la gente dice otra cosa". 

     Es inmoral pergeniar el modo de coptar el libre alvedrío de los otros, atacar su libertad y proponer cualquier enemistad o poner en riesgo a la paz. Como inmoral es traicionar la buena fe o los acuerdos con los otros o faltar a los contratos, por ejemplo. En este caso, la cuestión empeora, porque no sólo reune las inmoralidades antedichas, sino que la supuesta Encuesta no es tal y sus resultados tampoco son tales, agravado nuevamente por el hecho de estar publicada en un medio informativo y no publicitario. Es decir, el diario de los Saguier no dejó inmoralidad por cometer. La sección Encuesta bien podría ser rebautizada Estafa.

    Por último, hay que decir que no todo es malo. Quienes tengan una mínima experiencia podrán leer en este tipo de operetas, las intenciones, los planes, los intereses, las concepciones, etcétera, del medio. Porque no hace falta ser muy pillo para leer "¿Está usted de acuerdo con la política inmigratoria de la Argentina?", como un neologismo de "Terminemos de recibir a estos negros de mierda de Latinoamérica". Ni hay que serlo para advertir el plan de presión en ese sentido. Ni para adivinar intereses, por ejemplo, económicos, al sintonizar con su público, y políticos, al tratar de minar la unidad latinoamericana, entre otras cosas que los pintan de cuerpo entero..