15 julio 2009

Indec (sacando números)

Ahora que todos hablan de todo, menos los mismos de siempre que no hablan de lo mismo de siempre, parece que se puede hablar del Indec sin que un K te mire midiéndote para el primer bollo y sin que un sujeto de educación mediática, un garca medio pelo o un opositor, quiera hacerse amigo.

Un precio, además de indicar un valor, determina el lugar exacto y comparativo, de alguna cosa en un momento dado. Sobre el precio influyen y él influye a su vez sobre incontables variables. Dirán que incluye el costo de la materia prima, el de la realización del producto y un plusvalor que el empresario agregará para que su negocio rinda, se mantenga y lo mantenga a él.

Pero un precio también puede subir de acuerdo a la necesidad de que sea el producto. Y su oferta. O por incontables estrategias. Nuestra experiencia se sirve de ejemplos de la historia tanto de precios extremadamente altos o inflados -inflación-, por ejemplo, por motivos únicamente políticos (como el golpe económico organizado por empresarios contra R. Alfonsín, o las presiones contra Perón) o por el contrario, muy bajos precios, por ejemplo, cuando nuevas tiendas o producto se instala o tiene el dinero suficiente para perder plata hasta que la competencia quede eliminada, son ejemplos de incidencias de otra índole, en cuyo precio poco influyen razones de la teoría económica.

Constante y múltiple es la alusión en los medios, desde antes de que el Indec cambió su metodología de medición, con "no dice" o "esconde la verdad", "falsean las estadísticas", que Guillermo "Moreno es un patotero" o "que aprieta empresarios". ¡Enhorabuena! dirá cualquier mediocre conocedor de la historia empresaria nacional. Algún otro comentará soezmente que "seguro llaman aprietes a que no les besó el anillo, o la pija".

El control de precios es algo sensible y el de las estadísticas oficiales, cosa de Estado. Sin entrar en la discusión acerca de si está bien incluir el aumento de los precios de los pasajes a Miami para elaborar las estadísiticas que indiquen quién está debajo o encima de la línea de pobreza. Ni entrar en la lucha de sus trabajadores, envidiable más allá de que coincida o no. Es hora de presentar mi opinión personal, o la postura de la que soy hincha. Tal el rigor que deben esperar.

Elementos:

1 Empresariado.
Características principales. Siempre cómplice, siempre enemigo, siempre gorila y siempre cipayo. Atributo. Dueño de los medios de producción, usufructúa los privilegios que la Ciudadanía, fuerza de trabajo, le otorga. Ocupa instancias de decisión. Al redistribuir -en la selección de quién y con qué atributos accederá a los medios de subsistencia- imprimirá ideología y reproducción cultural. Hace prevalecer preferencias personales con ello, pero también con sus instituciones y su consumo. Además, cuenta con el aparato de difusión, promoción y producción de la realidad de su lado. Con la complicidad o asociación de una comisión interna opositora. Y con los profesionales reemplazados de su cargo.
Evaluación. Si con todo eso no pudieron cargarse a Moreno es que el tipo es muy pesado o está muy limpio.

2 Guillermo Moreno.
Características Principales. Parece que se la banca, va al frente y es leal. Además de su conciencia de clase.
Atributo. Con el tándem empresario y toda su saña en contra, no pueden decir más que que "aprieta a empresarios" y "manipula datos". Eso para mí habla muy bien de Moreno. O es muy pesado o está limpio.
Evaluación. Hasta de De Vido, que supuestamente es más pesado que Moreno, se dijeron cosas muy malas. ¿Está limpio Moreno?

3 Ciudadanía.
Teniendo en cuenta que la clase empresaria nunca veló por la felicidad del pueblo, no debe creer que esta vez su lucha sea por la transparencia de las cifras oficiales.
Teniendo en cuenta sus complicidades históricas cuesta creer que esta vez su lucha sea por el derecho de todos los ciudadanos a la información pública.
Teniendo en cuenta que la acusación es que anotan de menos, es decir, que el oficialismo manipularía las cifras de manera de que parezca que hay menos inflación de la que ellos, formadores de precios, han fijado, entiendo finalmente que Moreno es el que me miente, pero los que me rompen el orto siguen siendo los mismos.
Conclusión: Ciudadanía debe luchar por cifras oficiales transparentes, con un tipo de medición que más le convenga, que siempre será uno autónomo, soberano y el que le convenga al país más justo. Es decir, Ciudadanía deberá luchar por cifras oficiales transparentes luego de terminar con el empresariado cipayo, privilegiado y opresor.

2 comentarios:

Ulises Dumond dijo...

Acá había un comentario de un tal Sebastián, que borré sin querer, tratando de borrar una de mis respuestas (cuya publicación dupliqué a causa de la conocida torpeza consistente en olvidar actualizar la página y, al ver "1 COMENTARIOS", pensar que no estaba publicado.
Espero de nuevo el comentario. Pasado un tiempito, lo cuento con mis palabras y a la facce de sóretta.

Arqueros Sin Manos dijo...

Oiga: Ud. fue el que se mandó la cagada. Lo menos que podría hacer es tratar al cliente un poco mejor que diciéndole "un tal Sebastián".